Pocas industrias tienen un impacto en la naturaleza tan grande como la industria papelera, la cual en los últimos años ha tenido grandes inversiones económicas y desarrollos tecnológicos para minimizar sus efectos negativos en el medio ambiente.
A pesar de los esfuerzos por reducir el impacto medioambiental, el sector papelero y las empresas de distribución de papel han conseguido trasmitir diversas falsedades que han llegado a calar fuerte en el mercado de papel, a saber: el papel reciclado contamina más que el blanco; el papel reciclado estropea las fotocopiadores e impresoras; el papel reciclado es más caro; y, por último, el “papel ecológico” verdadero es el papel de fibra virgen libre de cloro elemental (ECF), precisamente el que fabrica mayoritariamente el sector papelero español.
El resultado de este ataque del sector papelero se ha traducido en un descenso de las ventas de papel reciclado en España. Administraciones públicas que a mediados de los años 90 tenían una política de compras de papel reciclado para el consumo interno han dado pasos atrás y consumen hoy en día papel blanco de fibra virgen. Hasta el Ministerio de Medio Ambiente y la Dirección General de Conservación de la Naturaleza han sucumbido al empuje.
Las naciones industrializadas, con el 20% de la población mundial, consumen el 87% del papel para escribir e imprimir. Consumen pero, sobre todo, derrochan recursos, ya que entre el 30 y el 40% de los residuos sólidos urbanos generados en Europa son papel y cartón. Usamos demasiado papel y, además, lo tiramos a la basura.
En el caso de España, desperdiciamos anualmente, un millón de toneladas de envases de papel y cartón y 850.000 toneladas de papeles de impresión y escritura, un 40% del papel y cartón consumido
¿Sabías que fabricar mil kilos de papel blanco implica un consumo de 100.000 litros de agua, de los cuales, un 10% altamente contaminado termina en nuestros ríos?
¡Crea conciencia en tu empresa y preserva nuestro planeta!
Algunos consejos:
• Crea una cultura de reciclaje en tu empresa y evita el mal uso del papel implementando algunos ajustes mínimos en los hábitos de uso y consumo.
• Evita imprimir por imprimir, ya que es inconscientemente un atentado contra el medio ambiente.
• Almacena los archivos en forma electrónica y no solo evitarás consumir papel sino que también ocuparán menos espacio físico.
¡Si todos hacemos un esfuerzo y nos comprometemos a reducir los desperdicios de papel, evitaremos la tala de miles de árboles anuales que está conduciendo a la deforestación de los bosques y llevando a la pérdida de miles de especies!